Feria de la Trufa
La Feria de la Trufa es un evento que se celebra cada último fin de semana de junio en el pueblo de Soto en Cameros (La Rioja, España) desde 2005. Está dedicado a promocionar la trufa, hongo que se cultiva en el municipio. Acoge a gran cantidad de visitantes que acuden a disfrutar de actividades gastronómicas, lúdicas y culturales, así como para comprar en su mercadillo.
Origen
editarEl Ayuntamiento de Soto en Cameros, con la ayuda del Gobierno de La Rioja, introdujo el cultivo de la trufa a principios del siglo XXI. Ambas instituciones consideraron que, al estar enclavado el municipio en la reserva de la biosfera de los valles del Jubera, Leza, Cidacos y Alhama, la trufa podría contribuir al desarrollo sostenible de la zona, proporcionando una alternativa económica a los habitantes del lugar que permita fijar la población en esta zona de montaña. Por consiguiente, se plantaron 71 hectáreas con encinas micorrizadas. Ello no obsta para que la trufa se pueda encontrar también en forma silvestre.
Además, este hongo es beneficioso desde el punto de vista ecológico, ya que favorecen el crecimiento del arbolado y ayudan a evitar la erosión.
Para promocionar el nuevo cultivo, el Ayuntamiento creó en 2005 la Feria de la Trufa, que ha obtenido un gran éxito de asistencia de público procedente de la propia provincia de La Rioja y sus alrededores. El evento se ha consolidado y ha superado a las fiestas tradicionales como medio de atracción turística. Además, ha contribuido a difundir el uso de la trufa en toda La Rioja y provincias adyacentes. A pesar de ser considerado un producto «de lujo», mucha gente ha comprendido que no es tan caro como se cree, ya que el mismo hongo puede tener utilidades diversas.
En la cocina, la trufa se utiliza preferentemente junto con las grasas alimenticias. Productos como el aceite, la nata o el huevo se impregnan del aroma del hongo y lo transmiten a los platos en cuya elaboración son utilizados. También se puede utilizar de forma directa en ralladura o láminas.
Rutas
editarUna de las actividades habituales es organizar rutas para conocer el pueblo y sus alrededores. Esta actividad es en ocasiones de naturaleza preferentemente deportiva, como ocurre al seguir la ruta del cañón del río Leza en compañía de un guía; esta visita permite admirar esta garganta natural, la zona de especial protección para las aves y los yacimientos de icnitas próximos. Pero en otras ediciones puede consistir en realizar una vista teatralizada por las calles del propio pueblo escuchando los divertidos comentarios de un grupo de actores.
Mercadillo
editarEl domingo por la mañana se celebra un mercadillo con doble orientación. Por un lado se colocan los tradicionales puestos de artesanía habituales en eventos de este tipo. Por otro lado, también hay puestos de venta de productos alimenticios propios de Soto en Cameros, la zona del Camero Viejo, la reserva de la biosfera de los valles del Jubera, Leza, Cidacos y Alhama de toda La Rioja e, incluso, de otras regiones españolas. Entre los productos se pueden encontrar la propia trufa, miel, azafrán, setas, embutidos, patés, quesos, huevos, aceite, dulces. Además, no hay que olvidar que esta localidad camerana es el origen de los célebres mazapanes de Soto. Todavía existe una fábrica en el pueblo en la que se pueden adquirir los exquisitos dulces, elaborados en horno de leña.
Gastronomía
editarDada la temática de la Feria, la actividad gastronómica es importante. Además de las degustaciones en los puestos de venta de productos alimenticios que tiene el mercadillo, se suele ofrecer la sabrosa posibilidad de degustar un huevo frito trufado a media mañana. Otra alternativa suele ser el tradicional, eficaz y más contundente guiso camerano; todo ello regado con vino de Rioja.
Además de ello, se ha convertido en nueva tradición el invitar al «cooking team», un equipo de cocineros que explica al público asistente cómo utilizar la trufa en la cocina. Por último, los establecimientos de la localidad también ofrecen platos especiales. El restaurante del albergue situado en el antiguo Hospital San José sirve un menú trufado de interesante calidad; y el bar del casino puede ser una alternativa para quienes prefieren el picoteo.
Exhibición canina
editarUna actividad ya tradicional en la Feria es la demostración de búsqueda de trufa con la ayuda de perros. El público puede contemplar como un animal adiestrado localiza las trufas que se han enterrado poco antes al efecto. Cuando los canes buscan trufas en la naturaleza las encuentran con más facilidad debido a que la maduración hace que el aroma se difunda con el viento. Se trata de un espectáculo que agrada mucho a los más pequeños.
En alguna de las ediciones de la Feria se ha ido más lejos y se ha organizado un cursillo intensivo de adiestramiento en búsqueda de trufa por perros.