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Los Aleros es un parque ubicado en Mérida siendo una de las atracciones más tradicionales de Venezuela, con su temática de los años 30 ha atraído demasiada atención por los turistas.
Este parque ha sido inaugurado en 1984 el 28 de julio por el grandioso andino Alexis Montilla.
Los aleros te introducen en un parque lleno de emociones, miedo, risas, curiosidad y su conocimiento extenso de los pueblos andinos en los años 30.
Comprender
editarHistoria
editarLa idea original de los Aleros nace con el merideño Alexis Montilla, su amor a su pueblo andino forjó la idea de recrear sus costumbres tradicionales, desde sus recursos, casas, animales y su distintiva gente andina.
Por esto, en 1984 Alexis Montilla comienza la construcción de este parque para el disfrute de los turistas que deseen conocer un poco más la historia de Los Andes Venezolanos.
Panorama
editarFauna y flora
editarLos ambientes de los Aleros contaban con animales para su propia producción, por este pueblo podemos ver ovejas donde nacen sus accesorios, gorros, suéteres, y cobijas.
Se puede ver como los pueblerinos viven y comparten de su flora con animales como el pavo Real y el Ganso, quien rondan por todo el lugar. Además de caballos quienes son usados para otras atracciones del lugar.
Clima
editarEl clima ronda de 9 a 17 grados, dependiendo la hora y temporada del año en la que vaya.
Llegar
editarPrecios/Pases
editarDesplazarse
editarA pie
editarVer
editarHacer
editarAl llegar a los aleros se nos indican investigar todo el parque temático, cada rincón tiene una historia y actividad, donde se busca divertir al espectador.
Nos guiamos por rutas en donde podremos ver un camino lleno de curiosidades de la época, comida, mano de obra y sus costumbres.
Hay muchas actividades para el turista, desde aventuras hasta películas de terror, todo para el disfrute de los visitantes.
Llegamos al terminal de los Aleros, y se nos ofrece un sello de pasaporte para iniciar el recorrido, este pasaporte será la prueba de que se han realizado todas las actividades.
Siguiendo el camino principal encontraremos una casa embrujada, que nos lleva a una carreta con dulces de la época y a su vez un lugar de juegos, se nos invitan jugar con metras, perinolas y un juego de apuestas de la época. Después de los juegos seguiremos al bosque encantado, escuchando las instrucciones y advertencias de este, con el objetivo de conseguir un tesoro
Empezando la aventura seguimos un camino hasta el puente del muerto, luego llegaremos a un pasillo tenebroso, que si logras cruzar este reto llegarás a la cantina del zafarrancho, aquí se nos ofrecerá bebidas y la moneda de comercio, 1 morocota es igual a 1 dólar.
El tesoro está adelante de la cantina y una vez visto, seguimos el camino hacia el tobogán de cemento pulido más largo del país.
Una vez completado el camino principal se nos indica investigar todo el parque, curiosear cada rincón posible para aprender más del parque Los Aleros.
Comprar
editarLo que podemos conseguir en los aleros se nos hará saber una vez que hayamos recorrido el parque, ya que cada lugar de atracción ofrece algo diferente.
Aquí podemos conseguir: Arepas de trigo, Tortas, fresas con crema, helados, cervezas, jugos, refrescos, donas, bombones, maltas, miche, ponche, agua natural, agua de coco, helado artesanal y bebidas energéticas.
Esto de 1 a 5 morocotas.
También podemos tener acceso al pasaporte de la época por morocotas.
Comer
editarLa variedad de comida en los Aleros es extensa, ya que cada lugar te ofrece algo tradicional a su época, en estos podemos conseguir:
Tortas, fresas con crema, helados caseros, donas, bombones y arepas de trigo que son hechas por el molino tradicional, el trigo se muele con piedra y este funciona por un mecanismo de agua.
Podemos encontrar un restaurante con comida tradicional del pueblo una vez recorrido todas las actividades.
Beber
editarLas bebidas que encontramos en los Aleros son: Miche y ponche, cervezas, jugo, agua natural, agua de coco, bebidas energéticas y refrescos.
Aqui también podemos conseguir un trapiche de la época, manejado por bueyes, se puede tomar el jugo de caña como se hacía en los años 30.