Iruya es un pequeño y pintoresco pueblo de la provincia de Salta, Argentina, conocido y visitado principalmente por sus impactantes paisajes naturales, pero también por la forma en la que se preservaron en su gente hasta el día de hoy rasgos de la cultura de los pueblos originarios del lugar, y por los vestigios vivos y tangibles de éstas culturas que se revelan en ruinas arqueológicas naturales, tradiciones y creencias religiosas que subsisten y conviven con el cristianismo, e incluso en el idioma que su gente sigue utilizando para comunicarse entre sí.
Está ubicado en el departamento de Iruya, de quién es cabecera, y se encuentra a aprox. 310 kilómetros de la ciudad de Salta, aunque para llegar a él, necesariamente hay que pasar por la provincia de Jujuy. Está a una altura aproximada de 2800 metros s.n.m. Su patrimonio es natural y tangible
Cómo Llegar
editarExiste un único camino que llega hasta Iruya: desde la ciudad de Humahuaca, en la provincia de Jujuy, se debe tomar la ruta nacional n° 9 hacia el norte. Tras recorrer 26 km. aproximadamente por la quebrada, se llega al empalme con la ruta provincial n° 13, un camino de tierra que se desvía de la ruta 9 hacia el este (el desvío está señalizado). Tomando este camino, se deben recorrer aún 54 km. aprox. pasando por el pueblo de Iturbe y algunos otros parajes. La ruta transita el desolado y árido paisaje de puna a medida que remonta la sierra de Santa Victoria, límite geográfico de la quebrada de Humahuaca, hasta llegar al punto más alto de su recorrido en el abra del Cóndor, a una altura de 4000 metros s.n.m. aprox. A partir de allí, se puede empezar a percibir un cambio progresivo en el clima, flora e incluso fauna, visto que se está penetrando una zona de transición entre la puna y la yunga. En el abra del cóndor se ubica también la frontera entre Jujuy y Salta (Iruya hace parte de esta última). A partir del abra, quedan 20 kilometros de descenso aprox. hasta llegar al pueblo, a 2800 s.n.m.
El camino, sobre todo en verano, es casi imposible de transitar si no en un vehículo todo terreno, y exige cierta experiencia por parte del conductor; se transitan zonas de cornisa, se deben cruzar ríos y no es poco común que en las zonas altas del recorrido haya nieblas densas que reducen drásticamente la visibilidad.
Existen dos empresas de colectivos que realizan recorridos diarios de la ciudad de Humahuaca a Iruya y viceversa; los boletos de ambas pueden ser adquiridos en la estación de colectivos de Humahuaca, o en las respectivas oficinas en Iruya. Existen descuentos por la compra de boletos de ida y vuelta, con la fecha de vuelta abierta durante un mes como plazo máximo.
Alojamiento y Comida
editarEl pueblo, sobre todo en temporada alta (enero y febrero principalmente), ofrece una muy amplia variedad de posibilidades de alojamiento, desde hostales, hosterías, hoteles, hospedajes en casas de familia e incluso dos campings con los servicios básicos. Los precios son muy bajos si comparados con los de la quebrada de humahuaca, por ejemplo, la zona turística más cercana.
La oferta en cuánto a comida es también muy variada, y de muy bajos precios.
Qué Hacer
editarExisten muchas caminatas que se pueden hacer por los alrededores de Iruya, y todas ellas transitan por paisajes impactantes, subiendo o rodeando montañas de los colores más diversos, o recorriendo profundos valles y cañadas.
San Isidro: San Isidro es un pueblo aún más pequeño que Iruya, ubicado a unos 7 u 8 kilometros hacia el norte. Existe un camino ancho que bordea el río Colanzulí (que es el río que pasa por el pueblo de Iruya) por el que se puede avanzar un km. aproximadamente. A partir de allí, se prosigue hacia la izquierda por el lecho del río San Isidro (que desemboca en el Colanzulí) otros 6 o 7 km. El pueblo de San Isidro es visible desde el lecho del río.
La caminata tiene una duración aproximada de entre 4 y 6 horas entre ida y vuelta. No es un recorrido complicado, pero la altura puede llegar a fatigar más de lo previsto a quién no esté bien aclimatado. Existen varios puntos del recorrido donde es conveniente tomar senderos que suben la falda de los cerros contiguos al río, simplemente para evitar mojarse cruzándolo. Todos estos senderos están en la margen izquierda del río (yendo de Iruya a San Isidro), y son fácilmente identificables si se va lo suficientemente atento como para verlos.
La caminata ofrece la posibilidad de ver a lo largo del recorrido las terrazas de cultivo que hasta el día de hoy la gente del lugar sigue utilizando como método de práctica de la agricultura. Además, el pueblo en sí posee un pequeño pero bonito cementerio que vale la pena visitar. Hay también un comedor, e incluso la posibilidad de alojarse en el lugar.
Hay que tener cuidado con las lluvias imprevistas de verano, que pueden hacer crecer los ríos en muy poco tiempo y dificultar mucho e incluso volver peligrosa la caminata. Para mayor prudencia, se pueden contratar guías locales en Iruya.
Mirador del Cóndor: el mirador del cóndor está ubicado en el cerro que se encuentra justo al frente de Iruya. Desde la iglesia de Iruya, hay que cruzar en primer lugar el puente peatonal para llegar al otro lado del Colanzulí. A partir de allí se empieza el ascenso, de 300 metros de desnivel aprox., que puede llevar entre 1 y 2 horas dependiendo del estado físico y de la resistencia a la puna del individuo.
El mirador ofrece una vista inmejorable sobre Iruya y los valles y montañas circundantes. Además, es común ver cóndores o aguiluchos volar muy cerca.