Cocinar al aire libre es parte de la vida al aire libre, como acampar, ir de excursión o navegar en pequeñas embarcaciones.

Comprender editar

Para cocinar al aire libre se pueden utilizar una fogata y muchos tipos de estufas portátiles. Los principales problemas para los viajeros, además de la facilidad para cocinar, son el peso y la disponibilidad del combustible.

En altitudes elevadas y en climas fríos, existe el problema adicional sobre el comportamiento del combustible en tales circunstancias: es posible que no se vaporice como se esperaba y, por lo tanto —o de otro modo— no dé suficiente calor.

Tipos de combustible editar

 
Cocinar con una estufa de camping Trangia, puede utilizar gas o alcohol como combustible.

Hay muchos tipos de combustible como:

  • gas, a menudo butano, propano o una mezcla
  • el alcohol, a menudo desnaturalizado, puede contener metanol
  • petróleo, diesel, etc.
  • metaldehído o hexamina, vendidos como tabletas
  • madera, carbón vegetal, etc.

Las estufas multicombustible pueden utilizar varios combustibles diferentes, a menudo cambiando algunas piezas. Pueden limitarse a un surtido proporcionado por el proveedor, consulta las especificaciones.

Los tipos de combustible que se utilizan típicamente difieren de una región a otra, y los productos similares disponibles para otros usos pueden ser menos adecuados para estufas portátiles debido a los aditivos. Esto es especialmente un problema para los combustibles petroquímicos líquidos. Además, el alcohol para este propósito es difícil de conseguir en algunas regiones y puede tener aditivos inadecuados. La mayoría de los combustibles proporcionados por el proveedor de la estufa no están disponibles a menos que la estufa sea común en al lugar que quieres viajar.

En el caso del gas, el peor problema suele ser conseguir un recipiente conveniente. Como no debe haber fugas, debes utilizar conectores adecuados o buenos adaptadores.

La madera o los combustibles derivados únicamente de la madera procesada mecánicamente —es decir, cortada o prensada— están disponibles en casi en todo el mundo, pero son bastante voluminosas y no son una buena forma de almacenar combustible si el espacio y/o el peso son críticos y no puedas reabastecerte por mucho tiempo —por ejemplo, cuando estás en un barco o en áreas remotas y estériles como un desierto—. También puede haber problemas ambientales al quemar madera en áreas en peligro por la deforestación o transportar madera —y patógenos o especies invasoras que pueda contener— a diferentes áreas o zonas sensibles.

Alternativas de combustible editar

 
Un horno solar.

Las cocinas solares no requieren combustible, lo que las hace particularmente útiles para viajes largos sin la oportunidad de reabastecerse. Los hornos de paneles ligeros hechos de espuma o cartón cubiertos con papel de aluminio dirigen la energía del sol hacia la olla. La olla se puede colocar dentro de una bolsa de plástico transparente o delgada para acelerar la cocción, especialmente en días ventosos. La velocidad de cocción depende de la intensidad de la luz solar, de lo bien que hayas colocado la cocina solar y de lo que estés cocinando. Pequeñas cantidades de trozos más pequeños —como papas en cubitos— en la mínima cantidad de agua se cocinan más rápido que grandes cantidades de trozos grandes —como papas enteras—. Puede tomar tan solo 10 minutos derretir un poco de mantequilla, o hasta medio día para cocinar un par de tazones de arroz en una olla de panel pequeño. Incluso en un día frío, una cocina solar portátil puede acumular suficiente calor para cocinar arroz o pasteurizar el agua para beber o lavar, y es muy difícil quemar alimentos en ellos.

¿Quieres calentar algo, pero no tienes un horno solar? Si estás acampando en un automóvil, o incluso si simplemente estás dejando el mismo en un estacionamiento durante el día, es posible que puedas convertirlo en un horno solar. En este caso, generalmente es más seguro —y más rápido— si tu comida está precocida y necesitas calentarla en lugar de cocinarla. Estaciona tu automóvil al sol, coloca la comida en un plato apropiado en el tablero —es posible que desees colocar una toalla debajo del plato para proteger tu automóvil del plato caliente— y deja que la luz del sol haga el resto. Podrías calentar panecillos, derretir queso o recalentar una pizza.

Hablar editar

El mismo combustible puede tener diferentes nombres en diferentes países. No solo se diferencian el inglés americano y el británico, sino que también se utilizan con frecuencia marcas comerciales u otros nombres secundarios.

Llegar editar

Como los combustibles son inflamables, su transporte en aviones, barcos, trenes y autobuses suele estar restringido. Por lo tanto, poder utilizar un combustible disponible localmente es un gran beneficio. Si esto no es posible o necesitas llevar una cantidad moderada —por ejemplo, para llegar a un lugar sin buenas posibilidades de compra—, debes consultar la normativa pertinente. Además, si viajas con leña en tu vehículo, consulta las leyes regionales, ya que transportarla por las fronteras suele ser ilegal. Llevar cantidades «sospechosas» de algunos materiales inflamables —que las autoridades a cargo definirán eso— también puede hacer que te interroguen de manera intensiva o algo peor en algunos países o cuando viajes a algunas áreas sensibles.

Comprar editar

Según el país y el tipo de combustible, este puede estar disponible, por ejemplo, en gasolineras, puertos deportivos, tiendas al aire libre o supermercados rurales.

El combustible preferido localmente —especialmente en países con electrificación rural descuidada o sin electrificación— a menudo puede estar disponible incluso en lugares muy apartados, a veces a precios muy reducidos o muy baratos —al menos a escala mundial—. Un poco de investigación sobre si generalmente se usa gas, madera o algún otro tipo y cuál es el «empaque» común, puede ser de gran ayuda para reducir tus gastos y aumentar tus posibilidades de encontrar combustible a donde quieras ir.

Comer editar

Las estufas portátiles ligeras son las más adecuadas para sopas y guisos. No tienes horno —aunque puedes construirlos— y la sartén no es tan buena como en casa. Aunque las comidas preparadas secas se utilizan a menudo para ahorrar peso y tiempo, cocinar alimentos frescos con recetas simples no es mucho más difícil, y tener al menos algunos ingredientes frescos hace que la comida sea más sabrosa y saludable. ¿Qué pasa con los trozos de zanahoria secos para agregar a tu sopa? Es posible que puedas obtener alimentos realmente frescos buscando comida o pescando.

Sin nevera o similar, lo que puedes tener después del primer día es limitado. Pero si comes cosas que no tendrás el resto de tu viaje el primer día, tienes un día menos con la misma dieta. Las frutas y verduras pueden sobrevivir un poco más y, una vez secas, pueden conservarse bien durante todo el viaje.

En viajes largos con comida empacada, guarda algunas especias. Y nada te impide mezclar alimentos empacados y secos de manera imaginativa. Flor y sal para hornear pan no requiere nevera. Reserva algunas especialidades para cuando tu comida fresca se haya acabado.

Las guías de naturaleza salvaje a menudo ofrecen una rica selección de delicias para cocinar en fogata, incluidas técnicas especiales para hornear pan y asar pescado. Algunas comidas se preparan regularmente en fogata, incluso por campistas ocasionales. Prácticamente todas las comidas anteriores al siglo XX se pueden preparar con el calor del fuego con habilidad y creatividad; después de todo, así es como lo hacían nuestros antepasados.

Mantente seguro editar

Los combustibles son inflamables y algunos muy tóxicos.

  • Las fugas de gas son fácilmente fatales. Los gases utilizados pueden causar pérdida del conocimiento y la muerte y arderán intensamente si se mezclan con aire y se exponen a una chispa. Revisa los conectores y tubos, apaga siempre los interruptores, mantén los contenedores fuera de las áreas para dormir y asegúrate de que la ventilación sea buena.
  • El petróleo —gasolina— también causará una catástrofe si se vaporiza y se expone a una chispa, y la vaporización ocurre a temperatura ambiente. La ventilación y el control del humo también son importantes.
  • El alcohol arde con una llama que a veces es difícil de ver. Muchas personas han intentado repostar la estufa mientras el combustible aún está encendido —o la estufa aún caliente—. Tirar la botella puede esparcir un líquido ardiente entre los campistas, quienes pueden no notar de inmediato que sus ropas se están quemando. Deja siempre enfriar la estufa antes de volver a llenarla.

Si usas una fogata, siempre debes tener mucho cuidado, tanto para no hacer que las partículas en llamas salgan volando. Para extinguir el fuego de manera segura, ten suficiente agua al alcance. También ten en cuenta que la mayoría de la ropa moderna para exteriores es vulnerable a las chispas y al fuego.

Las parrillas desechables son populares desde hace muchos años. Sin embargo, son problemáticas, ya que permanecen calientes durante bastante tiempo y, por lo tanto, no deben dejarse sin supervisión después de su uso. Planifica cómo deshacerte de ellas y asegúrate de no provocar un incendio. Si es posible, lleva una parrilla adecuada u otras alternativas en su lugar.

Una vieja tradición de los exploradores después de apagar una fogata es dejar dos pequeñas ramas verdes en el sitio del fuego para probar que cualquier incendio que pudiera estallar en esa área no sea causado por ti. En cualquier caso, es una buena idea esperar una o dos horas después de apagar el fuego para asegurarte de que no queden brasas humeantes.

En condiciones secas o con viento, las estufas pueden provocar incendios forestales.

Mantén los alimentos a salvo de plagas, como insectos y roedores. Preferiblemente, cada alimento debe envasarse individualmente. Los alimentos también pueden atraer a animales peligrosos como los osos.

Esta guía es considerada útil. Tiene información suficiente para llegar y algunos lugares para comer y dormir. Un aventurero podría usar esta información. Si encuentras un error, infórmalo o sé valiente y ayuda a mejorarlo.